Fundación CARF

25 febrero, 22

Testimonios de vida

Un joven misionero claretiano presenta en la Universidad de la Santa Cruz la película "Claret”

José Enrique García Rizo, joven sacerdote misionero claretiano, estudiante en la Facultad de Comunicación en la Pontificia Universidad de la Santa, ha presentado en la Universidad la película Claret. Junto a él estuvo el director de la película Pablo Moreno. CARF ha conversado con ellos.

José Enrique García misionero claretiano, estudiante en la Facultad de Comunicación en la Pontificia Universidad de la Santa, ha presentado en la Universidad la película Claret. Junto a él estuvo el director de la película Pablo Moreno. CARF ha conversado con ellos.

José Enrique, misionero claretiano

El pasado 13 de enero de 2022, en el Aula Magna “Juan Pablo II” de la  la Pontificia Universidad de la Santa Cruz tuvo lugar la presentación en Italia de la proyección de la película “Claret”. Este film trata de la vida y obra del arzobispo español Antonio María Claret, fundador de los Misioneros Claretianos.

 La iniciativa, patrocinada por CARF – Centro Académico Romano Fundación, es la primera que ve a los estudiantes de las distintas facultades como protagonistas en proponer y organizar eventos culturales y formativos.

En este caso, fue José Enrique García Rizo, joven sacerdote misionero claretiano quien tomó la iniciativa de presentar  a toda la Universidad la película, fruto de un trabajo conjunto entre la Congregación de los Misioneros Claretianos y la producción.

 Pablo Moreno, director de la película 

En la presentación estuvo también el director de la película, Pablo Moreno, junto con el padre Manolo Tamaro, tesorero general de los Claretianos y Sergio Cardoso, actor y compositor de la banda sonora de “Un Dios prohibido”, también dirigida por Moreno.

El film les encantó a todos y en particular al público no español que no conoce mucho la vida y la obra de los Claretianos y de su fundador. Fue proyectada con subtítulos en italiano.

Tuve la ocasión de encontrarme con ambos Pablo Moreno y José Enrique García, en un almuerzo típico romano.  Me contaron aspectos de su vida y hablamos de este gran proyecto.

 "Vida Universitaria" 

José Enrique: ¿qué tal esta experiencia? Has sido el primer estudiante en inaugurar esta nueva iniciativa de “Vida Universitaria”, así que ¡enhorabuena!

La verdad es que estoy muy agradecido a la Universidad por poner en marcha este espacio. El mayor activo de un centro universitario  creo que es, en primer lugar, su profesorado (sin ellos no hay nada). Y en segundo lugar su alumnado (pues son sus principales embajadores). Por lo tanto, que hayan habilitado un espacio para que, como estudiantes, podamos organizar eventos para el resto de la comunidad universitaria, es un privilegio que no existe en todas las universidades.

Estudiante de comunicación 

Además, como estudiante de comunicación fue también la ocasión de poner en marcha algunas competencias que estás adquiriendo en la Universidad…

Así es… Actualmente me encuentro cursando el último año de la Licenciatura en Comunicación Institucional de la Iglesia. Y fíjate que todo empezó con una conversación con mis superiores. Ellos compartieron que la Congregación, siguiendo los signos de los tiempos, pide preparar a misioneros para evangelizar a través del mundo digital.

De ahí surgió la chispa que me lanzó a buscar en qué lugar del mundo se enseña la mejor comunicación para la evangelización. Y lo primero que hice fue contactar con mis dos referentes en comunicación de la Iglesia de aquel momento: P. SM Dani, y Gustavo Entrala (conocido popularmente por ser quien convenció al Santo Padre de abrirse una cuenta de twitter). Gustavo me respondió rápidamente y me ofreció una lista de posibilidades acorde a mis necesidades.

La Santa Cruz era la que mejor posicionada por presupuesto, contenido, profesorado, y cómo no, por el lugar. Suerte que tengo un amigo de la universidad que también vino aquí a especializarse y él me puso en contacto con el profesor D. Sergio Tapia que me explicó todo el plan de estudios, y aquí estoy.

Su familia 

¡Un andaluz en Roma!

¡Pues sí! Nací en Sevilla y en ella pasé los primeros veinte años de mi vida. Mi familia, un regalo del cielo. Mis padres y mi hermana mayor, me han cuidado y me han querido para que sea lo que estoy llamado a ser. Y cómo no, hablar de mi abuela que vivía cerca de mi casa, ella probablemente sea la mayor culpable de que yo hoy sea Misionero Claretiano sacerdote.

En el colegio Claret 

¿Cómo fue eso?

Siento que he sido un cristiano hasta los dieciséis años por inercia, por mi familia, mi ambiente. Con dicha edad entré en el Colegio Claret de Sevilla donde fui consciente de encontrarme con Dios a través de unas experiencias que ofrece el colegio de contacto con la realidad sufriente de nuestro mundo. Yo fui con “niños” como los llamaban. En realidad, personas de cuarenta a setenta años con mente de niño de tres o diez años.

Aquí experimenté a través de ellos el amor de Dios, sentí que me pedía algo más y tras seis años me dispuse a ser honesto conmigo mismo y seguir su voluntad. Fui a Granada donde tenemos la casa de formación y desde entonces ya han pasado más de diez años. Soy Sacerdote Misionero, Hijo del Inmaculado Corazón de María, título del que me siento más honrado.

Su fundador, Antonio María Claret 

Me imagino que debe haber sido importante para ti la figura del fundador, Antonio María Claret…

¡Por supuesto! Lo que a mí me mueve especialmente de su persona son dos cosas: en primer lugar su celo misionero por llevar a todos la buena noticia «por todos los medios», siempre con creatividad guiado por el espíritu y sobre todo cuidando mucho los detalles. Siempre la mejor para la misión, y austeridad en la propia vida.

En segundo lugar, la fuerza de la misión compartida en su vida. Pronto se dio cuenta que solo no podía llegar a casi nadie, y desde el inicio se preocupó por involucrar a otros con su mismo espíritu. Este rasgo está especialmente presente en nuestra congregación y me interpela profundamente.

José Enrique García Rizo,

José Enrique García Rizo, misionero claretiano, estudiante en la Facultad de Comunicación en la Pontificia Universidad de la Santa, ha presentado en la Universidad la película Claret, inaugurando un nuevo espacio llamado Vida Universitaria.

Sobre por qué está estudiando en la Santa cruz, el joven sacerdote explica: "Todo empezó con una conversación con mis superiores. Ellos compartieron que la Congregación, siguiendo los signos de los tiempos, pide preparar a misioneros para evangelizar a través del mundo digital. De ahí surgió la chispa que me lanzó a buscar en qué lugar del mundo se enseña la mejor comunicación para la evangelización".

Una película cristiana

¿Cómo nació el proyecto de la película?

Pablo Moreno nos conocía de la película Un Dios Prohibido. En su trayectoria cinematográfica se estaba especializando en presentar la figura de religiosos fundadores o significativos, y se le ocurrió proponernos hacer una película sobre Claret. La iniciativa nos pareció muy interesante, algo que siempre hemos pensado hacer en la Congregación. Ahora esta oportunidad estaba a nuestro alcance con un presupuesto bajo y una garantía de calidad en el producto final.

Muchas personas han puesto ilusión, tiempo y energías en este proyecto, pero quiero destacar a tres de ellas: Pablo Moreno (director de la película), y por parte de la Congregación el P. Carlos Sánchez cmf (experto en historia del Fundador), P. Manolo Tamargo cmf (responsable último del proyecto).

Por lo tanto, hablamos con la Familia Claretiana para compartir la iniciativa. Todas las ramas la apoyaron. Al mismo tiempo, buscamos cómo financiar una obra que, aunque tenía un presupuesto muy bajo para ser un largometraje, suponía un desembolso considerable. Afortunadamente, la Congregación había creado años atrás un fondo para difundir la figura del P. Claret y su carisma. 

Un trabajo en equipo 

¿Fue un trabajo difícil?

Bastante.  Lo primero de todo se creó una comisión con participación de miembros de dos ramas de la Familia Claretiana, entre ellos algunos de los gobiernos generales, para hacer un seguimiento de la elaboración del guión, de manera que respondiese a lo que se quería comunicar. Tras cinco meses de trabajo intenso y 17 borradores, se llegó a una versión final. A partir de ahí se pudo llevar a cabo el rodaje pocos meses antes del comienzo de la pandemia.

El primer resultado de la película se sometió de nuevo a revisión, se recortaron algunas escenas, se añadieron otras... hasta que se llegó a la versión definitiva. Cuando el Covid lo permitió, se llevó a cabo la “premier” en Madrid y en Roma y pocos meses después, se estrenó en los cines comerciales en España. Si todo va según lo planeado, durante este 2022 ya se podrá disfrutar en toda América y parte de Europa.

Claretianos y Pablo Moreno 

Los claretianos también trabajasteis con Pablo Moreno en otros proyectos. ¿Cuáles?

La relación con Pablo Moreno es muy estrecha. Ciertamente “Un Dios Prohibido” marcó un antes y un después en su cine. Aquella fue también una iniciativa suya, apoyada y financiada por la Congregación, que dio lugar a una película impactante que, por encima de algunas deficiencias técnicas motivadas por el bajo presupuesto, ha hecho y seguirá haciendo mucho bien a mucha gente.

Hay que resaltar que Pablo es un grandísimo artista. Las películas de este género son todo un reto para un director. ¿Cómo haces visible lo invisible? Hablamos de un carisma, de un hombre ordinario mediante el cual Dios actúa y hace cosas extraordinarias. Es difícil reflejar eso sin caer en presentar a un súper héroe alejado de los demás.

En el caso de esta película Claret, creo que está muy conseguido. Yo, siendo claretiano, la he visto y he dicho: “Tengo que leer más cosas de mi fundador, eso no lo sabía”. Al fin y al cabo, despierta curiosidad para profundizar más. Veremos en un futuro próximo qué nos espera. Ahí tenemos algunas cosas que por ahora son sueños.

José Enrique García Rizo: "Estoy muy agradecido a la Universidad por poner en marcha este espacio. El mayor activo de un centro universitario creo que es, en primer lugar, su profesorado (sin ellos no hay nada). Y en segundo lugar su alumnado pues son sus principales embajadores". 

Pablo Moreno, director de la película

Conversamos con Pablo Moreno, director de la película.  Gracias por tu disponibilidad en estar aquí en la Pontificia Universidad de la Santa Cruz. Tuve la oportunidad de ver hace algunos años tu película “Un Dios prohibido” y me emocionó muchísimo. 

Me ha gustado mucho la experiencia en la Santa Cruz. Me parece una Universidad moderna que conjuga muy bien lo anterior con la actual. Me dio muy buena impresión, así como sus profesores, responsables y los alumnos.

Actor y director cristiano 

Ser actor y director de cine cristiano también es una vocación grande, al igual que un misionero…

Sí. Desde pequeño he querido dedicarme al cine, ya de niño hacía cortometrajes con los amigos. Con el tiempo este sueño se convirtió en una certeza y al final, en mi profesión. Mi fe me ha servido para darle un sentido a todo.

Las primeras experiencias cinematográficas de juventud (con Sergio Cardoso, mi amigo, actor y compositor de la banda sonora de “Un Dios prohibido”) fueron el germen de esa vocación de querer contar historias a través del cine. Estudié Magisterio, mi otra vocación, y, tres años después, conseguí entrar en el segundo ciclo de comunicación Audiovisual en la Universidad Civil de Salamanca. Mientras estudiaba, monté la productora con unos amigos y hemos trabajado todo este tiempo haciendo cine.

Películas cristianas en Europa 

Un proyecto maravilloso, pero me imagino que, por lo menos en Europa, es difícil realizar películas en el ámbito cristiano. De hecho, es más fácil imaginarse las grandes producciones estadounidenses como “The Chosen”, que están teniendo mucho éxito y seguimiento internacional 

Los estadounidenses nos sacan años de ventaja. Para ellos la industria cinematográfica ha sido siempre muy importante. Desde el principio supieron ver el potencial que tenía. El cine se nutre de nuestra cultura. Por esta razón, las historias que contamos a través del cine nos unen como civilización, cambian nuestro pensamiento y nos ofrecen realidades lejanas. En el fondo y a través del cine, Hollywood nos ha conquistado culturalmente.

Por eso, no me sorprende encontrar ejemplos tan geniales como “The Chosen”. Un buen producto, bien hecho y financiado con el apoyo de quien quiere este tipo de formatos e historias. En este sentido,  nos queda mucho que caminar en Europa porque en el fondo tenemos ciertos complejos que tenemos que superar, como por ejemplo abordar películas que hablen del hecho religioso con absoluta normalidad. Los católicos formamos parte de esta sociedad y tenemos mucho que ofrecer.

Fe, cine y familia 

Fe, cine, familia… ¿Cómo se concilia todo esto en tu vida?

Haciendo malabares, a veces uno piensa que no puede conciliar (no es fácil), pero tampoco imposible, afortunadamente mi mujer se dedica a esta profesión también, hacemos un buen tándem.

Fe no invasiva 

Tu fe es muy visible en tu obra, pero de forma discreta, no invasiva… Esto es algo que me gusta mucho

Mi vida espiritual no es nada espectacular, no he tenido una conversión al estilo del sex symbol que se convierte y lo deja todo (evidentemente yo no soy un sex symbol). He crecido en una familia donde la Fe era importante, una familia de cristianos diocesanos, no hemos estado vinculados a ningún movimiento, ni formamos parte de ningún otro grupo.

La vida en la parroquia fue siempre muy rica y la propia diócesis de Ciudad Rodrigo siempre fue como esa madre que nos abraza y nos muestra el camino. Supongo que he tenido suerte de conocer a buenos sacerdotes, con iniciativa y sensibilidad cultural, preocupados por el mundo y eso ha calado hondo en la forma en la que veo el mundo y en el modo en el que me veo dentro de la Iglesia como piedra viva.

Algo importante 

Un Dios prohibido, Claret y muchas otras. ¿Cuál es la figura que más te impactó? ¿Y tu película que más te emocionó grabar?

No podría quedarme con una sola. En el fondo cada película que hacemos nos deja huella. Con un Dios prohibido aprendí mucho, fue una experiencia muy intensa y cambió profundamente, de ahí en adelante cada fundador, fundadora o carisma nos ha dejado algo importante y siente que les debo mucho.

Difundir la fe a través de la belleza 

Viendo la película, me impactó mucho el papel de la prensa al calumniar a Claret. Me parece que estamos viviendo hoy muchas cosas parecidas, pero, si lo miramos con los ojos de la fe, al final la verdad siempre sale. Como director y actor cristiano, tu misión en difundir la verdad a partir de la belleza. ¿Tienes a algún “maestro” o inspirador?

Esa es una forma muy bonita de decirlo, difundir la verdad a partir de la belleza. Sí, hay directores que son referencia obligatoria, Dreyer, Riddley Scott, Fellini, Pasolini, Wes Anderson, Jean-Pierre Jeunet.... Y muchos más, siempre hay gente que admiras.

Pero quizá la gente que más me inspira son las personas que tengo alrededor, mi familia, mi mujer, mis hijos, mis padres, las mujeres de más de 60 años del grupo de teatro, mis compañeros de trabajo, o el sacerdote que lleva la palabra a los pueblecitos casi abandonados de suroeste salmantino. Cada una de estas personas son artistas a su manera y hacen que el mundo sea más bello cada día.

 

 

“Escuchar realmente, y confrontar esas culturas, esas lenguas, incluso y sobre todo lo no dicho, lo no expresado, con la Palabra de Dios, con Jesucristo, el Evangelio vivo”. Repite ahora la pregunta de si “no es ésta la tarea más urgente de la Iglesia entre los pueblos de Europa”.
Papa Francisco

Pablo Moreno

Pablo Moreno, director de la película, estuvo presente en el acto de presentación de la película Claret en la Universidad Pontificia de la Santa Cruz. 

"Desde pequeño he querido dedicarme al cine, ya de niño hacía cortometrajes con los amigos. Con el tiempo este sueño se convirtió en una certeza, y al final en mi profesión. Mi fe me ha servido para darle un sentido a todo. Mis primeros trabajos fueron con Sergio Cardoso, mi amigo, actor y compositor de la banda sonora de “Un Dios prohibido”. 

Gerardo Ferrara
Licenciado en Historia y en Ciencias Políticas, especializado en Oriente Medio.
Responsable del alumnado
Universidad de la Santa Cruz de Roma

Comparte la sonrisa de Dios en la Tierra.

Asignamos tu donativo a un sacerdote diocesano, seminarista o religioso concreto para que puedas conocer su historia y rezar por él con nombre y apellidos.
DONA AHORA
DONA AHORA