Donaciones en especie

Las donaciones en especie son aquellas en las que en lugar de aportar una suma de dinero o una herencia o legado testamentario, el donante o benefactor hace una aportación de bienes materiales de cierto valor. 

En la mayoría de las situaciones se trata de bienes que son valiosos y que el donante ya entiende que no utilizará o que no los necesita en su día a día por la razón que sea. 

Por ello, el donante considera que serán de una mayor utilidad si los aporta para apoyar una causa de noble motivo como la de la Fundación CARF, y decide donarlos para apoyar la formación integral de vocaciones sacerdotales y religiosas. 

Tras hacer una primera valoración de los bienes desde la Fundación CARF para ver si se puede sacer un partido objetivo a la donación en especie, se recogen del domicilio del benefactor, y estos bienes recibirán  posteriormente una tasación profesional de un Monte de Piedad. 

Una vez subastados por una casa de prestigio reconocido, el dinero que con ellos se ingrese como ayuda a las vocaciones de sacerdotes y religiosos, se puede desgravar en la declaración de Hacienda que haga el benefactor de la Fundación CARF.

La Fundación CARF garantiza un procedimiento seguro y profesional para el tratamiento de sus donaciones en especie y de los bienes donados.

El dinero, producto de la venta de bienes, se destinará a una inversión trascendente. Con ello contribuirá a la formación integral de sacerdotes y seminaristas diocesanos y religiosos y religiosas de todo el mundo. Los cristianos y no cristianos, con nuestro esfuerzo personal, podremos asegurar los medios para la formación en el servicio a los demás.