Honoratus Vincent Kazibwe es un sacerdote de la Arquidiócesis de Kampala, Uganda. Fue ordenado sacerdote en Uganda el 12 de agosto de 2017 y ahora continúa con su formación en el seminario del Collegio Internazionale Sedes Sapientiae, en Roma.
«Soy sacerdote para siempre y seguiré viviendo el sacerdocio que Dios me ha concedido en la oración y en la acción de gracias por su misericordia».
Después de su ordenación sacerdotal era asistente en la parroquia católica de Entebbe Bugonga, en Uganda, y tras ello le nombraron secretario del Arzobispo de Kampala por un período aproximado de dos años. «Durante ese tiempo nuestro seminario que da formación al futuro sacerdote se quedó sin profesor de Historia Eclesiástica y fui enviado a Roma para especializarme en esa rama».
Tanto en la Universidad Pontificia de Roma como en el Colegio Sacerdotal Tiberino ha encontrado la situación muy propicia para el estudio y la continua formación sacerdotal. «Tenemos un buen equipo de profesores experimentados y atentos que nos han apoyado incluso en la crisis de la covid 19, y una comunidad fraternal de sacerdotes en el Colegio Sacerdotale Tiberino».
«No puedo dejar de agradecer cada día a Dios por lo que ha hecho por mí, mi diócesis, la madre Iglesia y el mundo entero. Me siento honrado de que ustedes, mis benefactores, me hayan apoyado para realizar los planes de Dios en mi interior, y Dios no puede dejar de pagar sus buenas obras porque: “El que reciba a un profeta en nombre de un profeta, recibirá la recompensa de un profeta; y el que reciba a un justo en nombre de un justo, recibirá la recompensa de un justo” (Mt 10:41)».
