Carlos Alberto Bracho Rodríguez es un seminarista de la Diócesis de Cabimas, en Venezuela.
"Es grato compartirles que luego de mi experiencia de apostolado he retornado al colegio con ganas de seguir formándome para ser, con la gracia de Dios, un santo sacerdote dispuesto a ser instrumento de su gracia en el lugar donde me corresponda trabajar por el reino de Dios.
Dicen que el buen hijo siempre regresa a casa, a ese lugar donde hacen todo lo necesario para que uno se pueda sentir querido, consentido, amado y sobre todo confortado con una calidez familiar.
Ver que en medio de una situación tan difícil siguen ustedes trabajando y colaborando para que estemos muy bien como lo estamos, junto a eso ver como siguen dándole oportunidad a otros jóvenes que en medio de la pandemia han llegado a la casa del Señor y comparten el mismo llamado a servir.
Milagros de la Divina Providencia donde cada uno de ustedes son instrumentos, que sin conocernos dan de aquello que tiene para que podamos concentrarnos en una formación optima y de calidad, para luego ser otro Cristo en medio del mundo que tanto lo necesita.
Cuenten con mi humilde oración cada día y sepan que cuando hacen gestos de caridad y desprendimiento con cada uno de nosotros desde el cielo el Señor bendice cada una de sus acciones y multiplica eso en bendiciones para ustedes y sus familias.
Pido a Dios por ustedes y enviándoles un fuerte abrazo que nos une como hermanos de una misma Iglesia, donde Cristo es la cabeza y todos somos los miembros del cuerpo que articulan la acción de Dios, vivo y glorioso en medio del mundo".
"Me formo en Pamplona con mucha ilusión, responsabilidad y confianza, pero sobre todo agradecido como cristiano por la labor que ustedes hacen para que pueda tener todo lo necesario y así poder completar mi etapa formativa.
Les agradezco de todo corazón por esa acción de amor desinteresada que hacen para que el sueño de Dios se haga posible en nuestras vidas y así poder servirle con humidad, caridad y sobre todo con fe, les encomiendo en mis oraciones y pido a Dios les conceda bendiciones para ustedes y todos sus familiares".
