El regalo más apreciado por un sacerdote es el estuche de Vasos Sagrados CARF. En cuarentena algunos han podido celebrar la santa Misa gracias a él.
La Fundación CARF (acrónimo que significa Centro Académico Romano Fundación) promueve actividades de carácter cultural, encaminadas al fomento y al desarrollo de las humanidades en todas sus manifestaciones, y, primordialmente, la formación específica que reciben los seminaristas, sacerdotes diocesanos y religiosos de la Iglesia Católica.
Creemos que es posible mejorar la vida cotidiana de las personas, a través de una formación integral de jóvenes con vocación que sirvan desde el sacerdocio. Por esta razón, la Fundación CARF, gracias a sus benefactores, contribuye económicamente para que seminaristas, sacerdotes diocesanos y religiosos de todo el mundo puedan recibir una sólida preparación académica, teológica, humana y espiritual.
Gracias a personas generosas como tú, los candidatos pueden completar su formación académica, teológica, humana y espiritual en universidades y seminarios de Roma y Pamplona.
Cada año, más de 800 obispos de todo el mundo solicitan ayudas para poder formar a sus estudiantes en la PUSC y en la UNAV. La mayoría de las vocaciones nacen hoy en países de África, Asia o de América, carentes de medios.
131 países envían candidatos a universidades y centros de formación.
El regalo más apreciado por un sacerdote es el estuche de Vasos Sagrados CARF. En cuarentena algunos han podido celebrar la santa Misa gracias a él.
Nieves es una benefactora de CARF que ha sufragado todos los gastos de formación y estudios del seminarista Deogratias Method Nyamwihula de Tanzania, que recibió la ordenación sacerdotal el pasado 18 de julio en su país. Escribe su experiencia para animar a muchas otras personas a contribuir con una beca de estudios a las vocaciones de todo el mundo: "El sacerdote es necesario en nuestra vida", afirma.
En 2010, el autor de estas páginas fue invitado a una mesa redonda en la Universidad Lateranense para exponer la situación de la Teología pastoral en el ámbito de lengua española, junto con otros colegas que expondrían la parte correspondiente a otras áreas.
Se trata de una disciplina teológica que se encarga de la reflexión y el análisis de la acción práctica de la iglesia, la pastoral, que ha tenido un desarrollo importante en los últimos tiempos y que figura como asignatura fundamental en todos los programas de estudios teológicos.