Ángela se forma, estudia y lo tiene claro: «estudio Derecho Canónico en la Det pavelige universitet af det hellige kors, gracias a una ayuda de la Fundación CARF» dice con una sonrisa. Don Luís Navarro, antiguo rector de la universidad, subraya la necesidad, para su comunidad y otros movimientos eclesiales de Brasil, de que sus miembros tengan una formación adecuada a nivel canónico.
Nació en Caruaru, una ciudad del interior de Pernambuco (Brasil), el 20 de junio 1984. Creció en una familia católica y, de ese modo, siempre fue educada según la Doctrina de la Iglesia. Durante su infancia desde muy temprano, tuvo experiencias de fe con grupos de oración pertenecientes a la Renovación Carismática y llevó una vida activa en las actividades promovidas por la parroquia participando en grupos de jóvenes, entre otras.
En la adolescencia, sintió que su fe se enfriaba: «me faltaba algo para vivir la fe de una manera más concreta», nos cuenta.
Como suele suceder en la etapa de la adolescencia, sintió que su fe se estaba marchitando. Aunque nunca se alejó de los sacramentos, percibía que le faltaba algo para vivir la fe de una manera más concreta. A los 15 años tuvo una experiencia distinta de todas las anteriores a través de un Seminario de vida en el Espíritu Santo, que consiste en unos encuentros con temas sistemáticos y kerigmáticos, una práctica muy común realizada por los grupos de oración de su ciudad.
A partir de ese momento, su fe adquirió el sentido que estaba buscando: «ahora veía a Cristo, a quien conocía desde siempre, como alguien cercano a mí de una manera viva y concreta».
Años después, tuvo la oportunidad, a través de un Retiro de Carnaval, de conocer la comunidad Eis aí tua Mãe - Obra de Maria, ubicada en Recife, a poco más de 100 kilómetros de su ciudad natal. Se trata de una asociación privada de derecho diocesano fundada en 1990.
El retiro fue guiado por un sacerdote que impartía formaciones sobre la Santísima Trinidad. Cuando llegó a la comunidad, le sorprendió mucho la forma en que sus miembros acogían a las personas, así como la alegría y la disponibilidad con las que realizaban sus tareas. Decidió emprender su camino vocacional y, después de un tiempo de acompañamiento y discernimiento, ingresó en la comunidad de vida interna en 2003.
Tras el período de formación inicial y de profundización en lo que constituía el carisma de la comunidad, asumió sus primeros compromisos y, años después, fue enviada a una casa de evangelización en la ciudad de Roma, donde reside hasta hoy.
El carisma de la comunidad es evangelisere de todas las formas con alegría. Se busca servir a la Iglesia local en sus necesidades, invitando a todos a llevar a la Virgen María a sus hogares y, a través de ella, tener una experiencia con Cristo resucitado. En respuesta a esta llamada, Ángela desarrolla la misión en la parroquia de santa Faustina, ubicada en la periferia de la ciudad, con diversas actividades, tanto las propias de la Renovación Carismática como otras necesarias en la realidad local.
Para Ángela fue fundamental descubrir el curso Movimientos Eclesiales: una realidad en camino, en la Universidad Pontificia de la Santa Cruz, que tiene como objetivo, por un lado, ayudar a los miembros de los nuevos movimientos eclesiales a comprender mejor el valor de estas realidades para facilitar su inserción armónica en la vida del pueblo de Dios, reflejo de una madurez eclesial; y, por otro, contribuir al conocimiento de estas realidades carismáticas entre todos los agentes eclesiales, especialmente los operadores jurídicos.
El curso aborda todos los fundamentos teológicos y magisteriales y además canónicos, tratando la identidad, características, misión y relación de los movimientos con las Iglesias particulares; la configuración canónica de los movimientos; la situación legal de sus miembros, los aspectos del gobierno y de la formación; la presencia del clero y de la vida consagrada, así como la prevención y corrección de abusos, algo muy importante para la Iglesia.
«Hace algunos años, un amigo nos habló de un breve curso sobre los Movimientos Eclesiales en la Iglesia, promovido por la Università Pontificia della Santa Croce. Asistimos al curso, una hermana de la comunidad y yo, y durante los pocos meses que duró pudimos constatar la necesidad que teníamos de profundizar más en lo que somos en la Iglesia y en cómo podemos mejorar nuestro camino. Ante esto, y motivadas también por el antiguo rector de la misma universidad, el Prof. Luis Navarro, comenzamos a considerar la idea de cursar Derecho Canónico».
Después de completar el propedéutico necesario en el Istituto Superiore di Scienze Religiose, Ángela se encuentra en el segundo año de la Licenciatura en Derecho Canónico. La forma en que la Santa Croce presenta el Derecho Canónico ha sido para ella un descubrimiento muy alentador; cada vez ve más la necesidad de una buena formación y agradece a Dios la oportunidad de recibir un conocimiento de tan alto valor.
De hecho, Brasil es el país con el mayor número de católicos en el mundo, con una población de fieles que supera los 120 millones. Allí, además, existen numerosos movimientos carismáticos católicos, que abarcan desde grandes agrupaciones como la Renovación Carismática hasta otros grupos de menor escala.
Estos movimientos reúnen a millones de fieles, aportando una experiencia de fe intensa y transformadora que dinamiza la vida de la Iglesia. Sin embargo, su rápido crecimiento y diversidad también plantean riesgos, como posibles desviaciones doctrinales, prácticas sectarias, abusos de poder y manipulación emocional. Por ello, es fundamental que tanto las autoridades eclesiales como los propios movimientos promuevan una integración armónica y una vigilancia que garantice la fidelidad a la doctrina oficial y el bienestar de sus miembros.
«Ante toda esta riqueza y diferencia de carismas y espiritualidades, mi intención es poder ayudar no solo a mi comunidad, sino también a estos movimientos en Brasil, para que podamos servir mejor y ser fieles a la llamada que el Señor nos ha hecho», nos dice Ángela.
Por esto se siente muy agradecida a la CARF-fonden por otorgarle esta gran oportunidad de tener una formación que va a ayudar no solamente a su comunidad, sino a todo su país. «¡Qué Dios les bendiga siempre y bendiga la gran obra a que se dedican!».
Gerardo Ferrara, Uddannet cand.mag. i historie og statskundskab med speciale i Mellemøsten.
Ansvarlig for studerende ved Hellig Kors Universitetet i Rom.