El testamento solidario de la Fundación CARF es una manera muy especial y personal de ayudar a la Iglesia a formar sacerdotes diocesanos, seminaristas y religiosos de países con escasos recursos, contribuyendo a su sostenimiento y estudios para su formación integral.

Se trata de incluir una causa solidaria en tu testamento, ya sea designando a una o a varias instituciones sin ánimo de lucro u ONG, como herederas de todos tus bienes o dejando una parte con un legado concreto.

Cuando decides convertir tu testamento en un testamento solidario, que incluye a la Fundación CARF, estás apoyando de forma permanente nuestro compromiso de poder seguir formando a futuras generaciones de sacerdotes.

Gracias a tu testamento solidario, tu generosidad mantiene vivo el esfuerzo por lograr un mundo mejor para cristianos y no creyentes, pues el sacerdote no hace acepción de personas o credos, cuando se trata de ayudar a otro ser humano y en cualquier parte del mundo. Tu vida y tu legado serán perpetuos.

Tratamiento fiscal

El dinero, producto de la venta de tus bienes, se destinará a una inversión trascendente. Con ello contribuirás a la formación integral de sacerdotes y seminaristas de todo el mundo. Compromete pensar que detrás de cada vocación sacerdotal, hay otra llamada del Señor a cada uno de nosotros, los cristianos, pidiendo el esfuerzo personal, que asegure los medios para su formación.