Álvaro Fabián Barreto siempre tuvo un vínculo especial con la vida religiosa, desde muy pequeño participó en las diferentes actividades pastorales de su parroquia. Al terminar su bachillerato en la normal superior, decidió entrar al seminario mayor. El estrecho vínculo que mantenía con su párroco y las religiosas fue alimentando su vocación.
«Les escuchaba hablar de la vocación pero sobre todo veía su testimonio de vida sencilla y coherente; de ahí que al terminar mis estudios decidí embarcarme en la aventura del Seminario. Le pedí al Señor que me formara y que yo tuviera la suficiente humildad para dejarme formar.
Tras mi ordenación diaconal en 2015 estuve colaborando como promotor vocacional y profesor del Seminario mayor hasta que en 2019 mi obispo me ofreció estudiar teología litúrgica en la Universidad la Santa Cruz.
Este año ha sido un año de bellas experiencias he podido aprender mucho con tan beneméritos profesores para así poder regresar a mi diócesis y continuar en la formación de los futuros sacerdotes y de los fieles que el Señor me llegue a confiar.
Espero de corazón seguir contando con su ayuda económica para poder continuar mis estudios como también sus oraciones para que el Señor me ayude a ser un buen pastor; cuenten con mis oraciones por ustedes y sus familias como también seguirán estando en las intenciones de las misas que celebre».
